Corte mexicana acusa a autoridades por tragedia infantil

2 de marzo de 2010

La Suprema Corte de Justicia de la Nación de México (SCJN) dio a conocer el informe preliminar sobre las investigaciones que realizó sobre el incendio en la Guardería ABC de Hermosillo, en el estado de Sonora, donde fallecieron 44 niños y niñas, el 5 de junio de 2009.

En el mismo responsabilizó al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) -organismo de salud pública encargado de las guarderías infantiles-, a la alcaldía de Hermosillo y al gobierno del estado de Sonora por un "desorden generalizado" en el esquema de funcionamiento y subrogación de las estancias. En México, debido a la demanda de servicios por parte de madres trabajadoras al IMSS, se implementó desde la administración del ex presidente Vicente Fox un esquema de subrogación de guarderías a particulares, como en el caso de la siniestrada ABC.

Según las conclusiones presentadas por los magistrados María del Rosario Mota y Carlos Ronzón al pleno de la Suprema Corte, un desorden generalizado en la cesión de contratos de guarderías infantiles a particulares por parte del IMSS, y en la supervisión y vigilancia en la protección civil en dichos espacios, permitieron que la tragedia ocurriera. De un total de mil 480 guarderías subrogadas a particulares por el IMSS, sólo 14 cumplieron a cabalidad las especificaciones para funcionar. Tal situación, dijeron los togados, presume que el diseño legal bajo el que operan dichas contrataciones entre el estado y particulares, no tiene la aceptación deseable. Del mismo total de particulares, sólo 409 tienen visto bueno de protección civil por parte de cuerpos de bomberos locales.

El informe detalló en su quinto apartado las causas de la tragedia:

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La causa del incendio fue un corto circuito en el motor de un enfriador de aire conocido como cooler. Debido a las altas temperaturas generadas por la corriente eléctrica diversas partes del motor se fundieron generando la ignición del papel que estaba cerca, propagándose las llamas hacia las cajas de cartón que contenían documentos y, algunas, placas de vehículos.

La inexistencia de un muro cortafuegos que dividiera las instalaciones de la bodega de las de la guardería, aunado a las oquedades y aperturas que había en el muro divisorio permitió que grandes cantidades de humo tóxico, gases y calor se concentraran en el espacio que había entre el falso plafón y el techo de la nave que albergaba a la guardería.

Cuando el cielo raso ya no resistió el calor cayó, permitiendo que el humo tóxico y los gases inflamables se vinieran abajo donde había oxígeno, lo que produjo un rápido e intenso flamazo en las aulas donde se encontraban los niños.

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Un total de 16 funcionarios de distintos niveles de gobierno fueron señalados en el informe, que no tendrá efectos vinculantes, sino informativos al presidente Felipe Calderón, la fiscalía mexicana y gobernadores de los estados de la República Mexicana.