EEUU endurece límites de polución

Stephen L. Johnson, el administrador de la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés) de los Estados Unidos, ha reducido por primera vez en más de 10 años la cantidad permitida del ozono que forma esmog en la atmósfera.

Smog en Los Angeles.
Aliazimi

Washington DC, Estados Unidos
13 de marzo de 2008

No obstante, la medida no produjo contento en ninguna parte: los ambientalistas esperaban cambios más drásticos, mientras que las empresas no querían ninguno en lo absoluto.

El ozono es un gas que puede provocar graves lesiones pulmonares y puede empeorar enfermedades como el asma; además, también aumenta el riesgo de contraer una infección pulmonar. La medida de la EPA fue de reducir el límite de ozono de 80 partes por mil millones (PPM) a 75.

La EPA no especificó qué tipos de cortes de emanaciones serían necesarios, pero se estima que los vehículos e industrias tendrán que reducir sus emanaciones. La medidad reforzará cortes en las tres docenas de metrópolis que violan los niveles, mientras que habrá también cortes en ciudades cuyo aire se consideraba limpio previo a la decisión. Los tipos de reducción variarán, y así también variará el tiempo para que se hagan – desde tres años para casos de violación marginal hasta 20 años para los peores casos, como la ciudad de Los Angeles.

¿Ozono?

A diferencia del ozono que forma parte de la estratosfera – y de la célebre "capa de ozono" – el ozono a nivel del suelo es dañino para las personas. Este gas se forma de óxidos de nitrógeno y compuestos orgánicos volátiles, resultado de la combustión en motores.

Smog en Nueva York.

En otras palabras, la contaminación atmosférica crea este ozono troposférico y dañino. Para reducirlo, hay que reducir "la contaminación por el transporte o por otras fuentes que también queman combustibles fósiles, o las calefacciones que queman gas o petróleo", según indica Heikki Willsted, del Fondo Mundial para la Naturaleza.

La medida "tiene que ver más con reducir los costos de la salud en Estados Unidos que la lucha contra el cambio climático", agregó el experto.

Descontento

La medida no produjo contento en el comité de asesoría científica de la EPA, que quería que el límite fuera de entre 60 y 70 PPM. El comité alegó que este tipo de reducción prevendría cerca de 4.000 muertes prematuras y cerca de 7.000 visitas al hospital.

Asimismo, el presidente de la ONG Clean Air Watch, Frank O'Donnell, señaló que "desafortunadamente, parece que la verdadera ciencia quedó contaminada por la ciencia política".

"El gobierno de Bush está comprometiendo la salud pública para ahorrarle dinero a la industria".

Tampoco hizo caso a los pedidos de las industrias, que dijeron que un nivel inferior a 80 arruinaría la economía del país.

"Esta decisión de la EPA de reducir el nivel de ozono sin necesidad impondrá nuevas y significativas cargas sobre los estados, cuando todavía siguen intentando cumplir con el nivel de 1997", declaró el Consejo Estadounidense de la Industria Química.

Fuentes