El Parlamento de Japón proscribe la posesión de pornografía infantil pero sin incluir al anime y manga

El Parlamento del país oriental ha prohibido este martes la posesión de material obsceno referente a la pornografía infantil, pero excluye a los subgéneros ecchi y hentai, pertenecientes al anime manga en las que figuren menores de edad como personajes en actividades sexuales.

Muchacha con pose sensual, en el estilo manga.

Tokio, Japón
18 de junio de 2014

Esta norma es originada por una enmienda de una ley aprobada en 1998, en la que se permitía producir material pornográfico sin ilegalizar su tenencia por parte del público, después de que la Cámara de los Consejeros recibiera el visto bueno de la Cámara de Representantes y en base a ello los que tengan posesión de estos artículos se podrían enfrentarse a una multa económica de un millón de yenes (7280 euros), urgiendo además a los proveedores de Internet a colaborar con las autoridades sobre posibles violaciones a fin de evitar mayor divulgación, según reportajes de las agencias de noticias Kiodo y Reuters.

Si bien la ley revisada define la pornografía infantil cuyo objetivo sea las partes intimas de los niños, para los defensores del anime y manga la medida no les cayó de total agrado, ya para la Asociación de Editores de Revistas de Japón la medida "podría llevar a una regresión de la libertad de expresión y limitar a los artistas y la cultura editorial", algo que el parlamentario Masatada Tsuchiya, del Partido Liberal Democrático, si bien defiende los géneros gráficos mencionados, alega que "hay algunas cosas tan depravadas que no hay porque defenderlas".

Además de los liberales, otros partidos como el Nuevo Kōmeitō y el Democrático han intentado incluir en la ley una investigación que relacione la pornografía infantil en el anime, manga y otros medios de comunicación en la violación a los derechos de la infancia; cosa por el cual el ministro de justicia Sadakazu Tanigaki solicita un cambio cultural por el cual se deje de cosificar a los niños con fines comerciales y sexuales.

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