El escritor y neurólogo Oliver Sacks revela que padece cáncer terminal

El escritor y neurólogo inglés Oliver Sacks, autor de libros como Migraña, El hombre que confundió a su mujer con un sombrero y Un antropólogo en Marte, reveló este jueves en un artículo publicado en The New York Times que sufre de cáncer terminal, una metástasis múltiple en el hígado producto de un melanoma ocular que le fue diagnosticado y tratado nueve años atrás.

Oliver Sacks en 2009.
Erik Charlton / Flickr

19 de febrero de 2015

"Sentí que mi salud era buena, incluso que era una fuerte. A los 81 años, aún nado una milla al día. Pero mi suerte se acabó, semanas atrás descubrí que tengo metástasis múltiple en el hígado", aseguró Sacks en su artículo titulado My Own Life — Oliver Sacks on Learning He Has Terminal Cancer.

El diagnóstico llega nueve años después de que le fuera diagnosticado y tratado con éxito un extraño tumor ocular, que muy pocas veces provoca metástasis. "Pertenezco al desafortunado 2% [que desarrolla metástasis]", indicó. Sacks, que es profesor emérito de neurología en la Escuela de Medicina Albert Einstein, se mostró agradecido de haber vivido casi diez años de buena salud, durante los cuales logró continuar escribiendo.

No obstante, "ahora me encuentro cara a cara con la muerte", revela. La metástasis ocupa un tercio de su hígado y, aunque existe la posibilidad de lentificar su avance, es un tipo de cáncer imposible de curar. Ante esta situación, el médico británico que reside en Estados Unidos desde 1965, asegura que piensa vivir sus próximos meses de la forma "más rica, profunda y productiva" posible.

"Esto no significa que he finalizado mi vida. Al contrario, me siento intensamente vivo", asevera. Asimismo, señala que espera profundizar sus amistades, despedirse de los que ama, escribir más, viajar si cuenta con las fuerzas y "adquirir nuevos niveles de comprensión y sabiduría". En este sentido, explica que dejará de poner atención a las "cosas no esenciales" como "la política o las discusiones sobre el cambio climático" que, sin embargo, aún le importan, pero "pertenecen al futuro".

No puedo fingir no tener miedo. Pero mi sentimiento predominante es el de gratitud. He amado y he sido amado; he recibido mucho y he puesto algo de mi parte; he leído y viajado y pensado y escrito. [...] Sobre todo, he sido un ser sensible, un animal pensante, en este hermoso planeta [...] ha sido un enorme privilegio y una enorme aventura.

— Sacks

Comentar

Fuentes