Diferencia entre revisiones de «Asesina de gatos se entrega por presión de los cibernautas chinos»

Tanto los ''bloggers'' como los periódicos chinos la denunciaron y buscaron su paradero, hasta que finalmente la encontraron e hicieron que se entregara. Al principio se pensó que estaba en Shangai, pero gracias a las capturas del video, algunos cibernautas establecieron que en el fondo aparecía una isla de la provincia nororiental de {{W|Heilongjiang}}.

Wang fue obligada a emitir un comunicado en la página oficial de Luobei, en la provincia nororiental de {{W|Heilongjiang}}, en el que promete no grabar videos matando animales de nuevo. La mujer afirma que su reciente {{W|divorcio}} la sumió en una fuerte {{W|depresión}} que la hizo maltratar animales como conejos y ranas, y manifestó que su comportamiento hirió a su familia, en especial a su hija. Wang y el camarógrafo, éste último trabajador de una estación provincial de televisión, perdieron sus empleos apenas se supo que eran los responsables de la grabación.

No obstante, China, país conocido por la gran cantidad de maltratos hacia los animales, no tiene leyes contra este tipo de acciones, si bien se anunció una investigación contra Wang y el camarógrafo, que trabajaba en una estación provincial de televisión.