Felipe Calderón es declarado presidente electo de México

6 de septiembre de 2006

El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TRIFE) ha declarado este martes (5) a Felipe Calderón, candidato del oficialista Partido de Acción Nacional (PAN) como presidente electo de México, más de dos meses después de los comicios generales del pasado 2 de julio. Calderón venció por 233.831 votos (0,6% de los sufragios) a Andrés Manuel López Obrador, candidato de la Coalición por el Bien de Todos (CBT).

"Se declara al ciudadano Felipe de Jesús Calderón Hinojosa presidente electo de los Estados Unidos Mexicanos para el período del 1 de diciembre del año 2006 al 30 de noviembre del año 2012, en consecuencia entréguese la constancia de validez correspondiente", fueron las palabras con que empezó el comunicado del alto tribunal, leídas por el magistrado Leonel Castillo, presidente del TRIFE. Si bien algunos jueces reconocieron ciertas irregularidades, no las consideraron relevantes a la hora de emitir la decisión. Otras, afirmaron, no fueron comprobadas.

Calderón reaccionó al fallo con las siguientes palabras: "A todos los convoco a unir fuerzas para orientar la vida de México a los valores que compartimos los mexicanos. Llegó la hora de la unidad y de los acuerdos. En mí encontrarán la total disposición para resolver las discrepancias que nos separan". Añadió que invitaba a todos "a participar en el diseño del próximo gobierno, en el diseño del futuro que queremos para nuestros hijos [...] los invito a dialogar (...) entre los mexicanos podemos pensar diferente, pero no somos enemigos".

López Obrador no acata el fallo

Por su parte, López Obrador dijo que desconocía "a quien pretende ostentarse como titular del Poder Ejecutivo federal sin tener una representación legítima y democrática". El candidato izquierdista había convocado en días pasados a una convención nacional democrática para el 16 de septiembre, en la cual según él se constituirá "un gobierno que cuente con la legitimidad necesaria para refundar la República y restablecer el orden constitucional".

Respecto de los magistrados del TRIFE, López Obrador afirmó que "no tuvieron el arrojo, la dignidad, el orgullo, la arrogancia de actuar como hombres libres. Optaron por convalidar el fraude electoral", mientras que llamó a Calderón "presidente ilegítimo, espurio y pelele".

Porfirio Muñoz Ledo, uno de los líderes del Partido de la Revolución Democrática (PRD), que respalda a López Obrador, dijo que "el fallo es ridículo en su redacción. Dice que hubo intervención del presidente de la república, pero no tanto. Que hubo abuso de los programas públicos, pero no tanto. Que hubo irregularidades pero no las suficientes. Todo reconoce que pasó pero no dice con qué criterio no lo considera relevante para el resultado de la elección". Por su parte, el ex canciller Jorge Castañeda, quien llegó a tener aspiraciones presidenciales, sostuvo que "sigue habiendo un tercio de la población que cree que la elección fue fraudulenta".

Mientras tanto, Calderón recibió felicitaciones de diferentes países y regiones. Dana Perino, portavoz de la Casa Blanca, dijo que su país espera que su "relación con México siga siendo amplia, profunda, y productiva para ambos países durante el gobierno del presidente electo Calderón". Desde Finlandia, la Unión Europea también reconoció el triunfo del candidato derechista, destacando que la misión de observadores que envió había dicho que la elección fue "imparcial, profesional y transparente". El ministro de relaciones exteriores español Miguel Ángel Moratinos también felicitó a Calderón y pidió a López Obrador atender "las reglas democráticas" y hacer "una oposición firme, una oposición democrática, una oposición para consolidar lo que es fundamental en la vida política, en la vida democrática, que es el respeto a los resultados".


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