Nicaragua concede asilo al líder indígena peruano Alberto Pizango

Lima, Perú
10 de junio de 2009

El líder indígena en las manifestaciones que dejaron un saldo trájico, Alberto Pizango, ha recibido el asilo político de Nicaragua, tras refugiarse en dicha embajada en Lima, huyendo de una orden de captura por la acusación de sedición.

El embajador nicaragüense Tomás Borge confirmó el asilo agregado: "Pedimos la comprensión del gobierno peruano. ¿Qué alternativa teníamos? Pidió refugio este hombre y Daniel Ortega, con su singular y tradicional espíritu solidario, le otorgó el asilo". Desde el lunes pasado se ignoraba el paradero de Pizango, tras las acciones violentas ocurridas durante el desalojo de las comunidades indígenas manifestantes por parte de la policía, en las cuales murieron unas 50 personas en la amazonía peruana. En las protestas, se exigía la derogatoria del decreto 1090 "Ley Forestal y de Fauna Silvestre", por medio del cual, de acuerdo con los manifestantes, se vulneran sus derechos de propiedad sobre sus tierras comunales y ancestrales. A la fecha, muchos de los nativos ya se han replegado, regresado a sus lugares de origen.

Repercusiones

Grupos indígenas de Bolivia solicitaron al gobierno peruano retirar la orden de captura, mientras que el presidente peruano, Alan García, los acusó de pretender desestabilizar al ejecutivo. Otros manifestantes se reunieron en la embajada de Nicaragua en Lima para oponerse al asilo político de Pizango, culpándolo de las muertes ocurridas durante el fin de semana.

La crisis desatada por la situación también tuvo repercusión en el gabinete ministerial, pues la Ministra de la Mujer y Desarrollo Social Carmen Vildoso renunció a su cargo por razones políticas, al manifestar desacuerdo con el manejo informativo del problema, en el que se calificó a las comunidades alzadas de "extremistas". Por su parte, el Primer Ministro Yehude Simon afirmó que "se siente culpable" por la muerte de los policías durante el fin de semana pero que no renunciará hasta que se solucione la crisis.

Diversas organizaciones no gubernamentales defensoras de los derechos humanos han acusado al gobierno de ocultar la verdad sobre los incidentes y han solicitado una investigación de los hechos, al tiempo que llamaron a un "uso proporcional de la fuerza" para el control por parte de las autoridades.

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Fuentes