Obrero municipal falleció en una obra privada del dirigente Guillermo Blanco

Provincia de Corrientes, Argentina
9 de febrero de 2022

Un trágico derrumbe ocurrido en la localidad de San Luis del Palmar se cobró la vida de un empleado municipal de 31 años, identificado como José Soto, quien servía en el área de Obras Públicas del gobierno comunal pero se encontraba realizando tareas en un predio privado del empresario y dirigente político Guillermo Blanco.

Los hechos ocurrieron la provincia de Corrientes en un lote de la empresa de televisión Intercable ubicado en la calle Juan J. Arce entre Rivadavia y 9 de Julio de la localidad palmareña, que pertenece a Blanco. Allí fue donde Soto sufrió heridas de consideración al ser aplastado por un muro de importantes dimensiones que se desplomó sobre su persona por razones que se encuentran bajo investigación. Su muerte se produjo mientras era trasladado en una ambulancia para recibir atención médica en la capital provincial, ubicada a unos 25 kilómetros del lugar de los hechos.

Los familiares del joven fallecido destacaron que Soto se encontraba en una situación de precarización laboral y había sido destinado a realizar tareas en una obra privada del arquitecto Guillermo Blanco, quien meses atrás había intentado ser candidato a viceintendente de la actual gestión municipal, a pesar de que su actividad en el municipio consistía en el mantenimiento y pintura de espacios públicos y calles.

El tío del obrero, Jorge Soto, manifestó sus sensaciones a través de las redes sociales. “Me sigo preguntando qué hacías ahí. Por qué estabas haciendo el trabajo de albañil en una casa, cuando en realidad tu puesto de trabajo era pintar postes de alumbrado y hacer jardinería en plazas. Da tanta bronca y angustia que, por tener poder, puedan hacer lo que quieran con la vida de las personas”, escribió el familiar en Facebook.

Abigail, hermana de Soto, también se expresó ante los medios de comunicación y sostuvo: “A él (por José) lo llevaron a hacer ese trabajo y ese trabajo no era obligación de él. Encima son re cobardes, porque nadie apareció cuando él estuvo tirado, aplastado, todo desfigurado. Guillermo Blanco, el empresario de medios propietario de la obra, se acercó a mi mamá y le dijo: ya está, qué le vamos a hacer. Se cagan en los inocentes.”

A raíz de estos hechos, se iniciaron actuaciones de oficio a través de la Comisaría de San Luis del Palmar, bajo órdenes de la Fiscalía y el Juzgado de turno de la Ciudad de Corrientes.

La declaración de Guillermo Blanco

En el marco de las pesquisas el dueño del lugar donde ocurrió el derrumbe declaró ante la policía que había pactado la donación de ladrillos de su vieja y derruida construcción al municipio, a cambio de que el municipio destinara la mano de obra necesaria para derribar el muro. De acuerdo con la versión del arquitecto, Soto habría sido enviado a realizar las tareas que resultaron en su muerte en el marco de ese acuerdo.

Por el momento, y tras prestar declaración, Guillermo Blanco permanece en libertad. Los familiares, por su parte, denuncian negligencia, tráfico de influencia, peculado, incumplimiento de deberes de funcionario público, trabajo en negro, abandono de persona y exigen justicia por la pérdida de Soto.