Policía británica afirma haber conjurado plan terrorista

La seccional antiterrorista y el servicio de seguridad de la Policía Metropolitana de Londres han afirmado la mañana del jueves (10) haber conjurado un plan terrorista para detonar bombas en al menos diez aviones en pleno vuelo desde el Reino Unido hacia los Estados Unidos. Las bombas iban a ser llevadas a bordo ocultas en equipaje de mano.

New Scotland Yard

10 de agosto de 2006

La operación antiterrorista se realizó durante varios meses. Scotland Yard afirmó que ha arrestado a 21 personas en Londres, Birmingham y el Valle del Támesis. En una rueda de prensa la tarde del jueves (10), el ministro del Interior John Reid declaró que la policía cree que los detenidos eran los "principales actores" del complot y afirmó que "de haberse concretado [el plan] la cantidad de víctimas habría sido de una dimensión sin precedentes".

Por su parte, Paul Stephenson, Comisionado Adjunto de la Policía Metropolitana (es decir, el "número dos" de Scotland Yard), dijo que "estamos convencidos de haber frustrado un plan elaborado por terroristas para causar un número de muertes y destrucción incalculables. Dicho simplemente, pretendía ser un asesinato masivo a una escala inimaginable".

Peter Neumann, analista del London's King's College, le dijo a la agencia Reuters que "este tipo de ataques con explosivos líquidos es especialmente preocupante. Los aviones siguen siendo vulnerables y en las próximas semanas los terroristas estarán pensando en algo más que hacer sobre lo que no tenemos ninguna idea. Si esto hubiese resultado habría sido, más allá de toda duda, el mayor complot terrorista en el Reino Unido".

"En los últimos dos meses al Qaida prometió que vengaría a Iraq y Afganistán atacando activos aeronaúticos británicos y estadounidenses. Yo veo un lazo directo con esto", señaló el experto en terrorismo Paul Beaver.

Medidas de seguridad en los aeropuertos

El MI5, el servicio interno de seguridad británico, ha elevado el nivel de amenaza a "crítico", es decir, que "se espera un ataque inminente e indica un alto nivel de amenaza para el Reino Unido".

Como consecuencia, se han incrementado las medidas de seguridad en todos los aeropuertos británicos, ocasionando retrasos en los vuelos:

Todas las aerolíneas con vuelos que salen de los aeropuertos del Reino Unido les han dicho a los pasajeros que no está permitido llevar equipaje de mano alguno a bordo de ninguna aeronave que parta del país.

Sólo los siguientes objetos son permitidos en la cabina, los cuales deben ser llevados en bolsas transparentes:

  • Billeteras y bolsos, con su respectivo contenido.
  • Documentos para el viaje, entre ellos pasaportes y tiquetes de viaje.
  • Fármacos con prescripción médica, pero no en forma líquida a menos que puedan ser verificados como auténticos.
  • Artículos médicos esenciales, como un kit para la diabetes.
  • Anteojos y gafas de sol, pero no en sus estuches.
  • Estuches para lentes de contacto, pero no botellas de solución.
  • Comida para bebé y leche, pero su contenido debe ser probado por el acompañante.
  • Artículos sanitarios para bebés.
  • Artículos sanitarios femeninos, sin caja.
  • Pañuelos y paños suaves, sin caja.
  • Llaves, pero no llaveros eléctricos.

No se permite el ingreso de fluido alguno a bordo. "Esperamos que estas medidas, tomadas bajo revisión por el gobierno, sean necesarias sólo por tiempo limitado", reza un comunicado emitido por el Departamento de Transporte[1].

Mientras tanto, el Departamento de Seguridad Interna de los Estados Unidos ha elevado el nivel de amenaza terrorista en los vuelos desde y hacia el Reino Unido provenientes de los EUA, a Código Rojo (Severo), por primera vez. Afirman que existe un riesgo de ataque terrorista para todos los vuelos entrantes de Gran Bretaña a los EUA.

Fuentes