Presidente panameño exigirá ante España e Italia la finalización de la ampliación del canal

3 de enero de 2014

El presidente de Panamá, Ricardo Martinelli, exigió ayer en un discurso presidencial a los gobiernos de España e Italia a que las empresas Sacyr e Impregilo cumplan con el contrato para terminar las obras de ampliación del canal de Panamá y así evitar una suspensión, advertido mediante una carta del consorcio Grupo Unidos por el Canal (GUPC) publicado el día de Año Nuevo, en el que daba a la Autoridad del Canal de Panamá un ultimátum de 21 días para cumplir sus demandas. Con estas declaraciones, el presidente panameño da un espaldarazo a la junta directiva del canal de Panamá.

Ricardo Martinelli, presidente de Panamá.

Martinelli adelantó que viajará a dichos países en compañía de funcionarios del canal y otros ministros de Estado, aduciendo que el motivo de los sobrecostos argumentado por el consorcio es un "cuentito" y que los gobiernos de España e Italia tienen una "responsabilidad moral" detrás de las acciones de las empresas. El consorcio GUPC reclama que la ampliación de la vía marítima ha proyectado hasta 1.600 millones de dólares en sobrecostos, lo que ha aumentado el costo total de la obra en un 50%; y también el consorcio ha culpado de la situación a la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) quien no ha sido transparente en el manejo de la información.

El gobierno español indicó ayer que han estado al tanto de la situación y buscan una mediación entre GUPC y la ACP. Según declaraciones del embajador español en Panamá, Jesús Silva, confirmó al presidente Martinelli que algún miembro del gobierno español se estará movilizando a Panamá en los próximos días para mediar en el problema.

El consorcio GUPC está liderado por la empresa Sacyr Vallehermoso y tiene como socios a la empresa italiana Impregilo, la belga Jan de Nul y la panameña Constructora Urbana S.A. (CUSA).

Según cables de la embajada de Estados Unidos en Panamá y revelados por el sitio Wikileaks en 2010, el gobierno panameño sabía de que la ampliación era un "desastre" y que el consorcio era "débil" y con "dudas genuinas" sobre su ejecución, según palabras del vicepresidente panameño Juan Carlos Varela, quien vaticinó que "en dos o tres años será obvio que todo fue un fracaso". Mientras que el presidente Martinelli respondió sobre la cuestión con una mueca y dijo estar "poco preocupado", levantando sospechas de que la elección del consorcio para realizar la ampliación se debió a influencias del entonces administrador Alberto Alemán Zubieta, cuyo primo es el presidente de CUSA, empresa que forma parte del consorcio GUPC.

Sacyr se desploma en la bolsa tras su anuncio de suspensión

Luego de publicar sus intenciones de paralizar la ampliación del canal de Panamá, la empresa Sacyr Vallehermoso, que conforma el 49% del consorcio GUPC, sufrió un descalabro en la jornada de ayer de la bolsa española al perder hasta un 18,7% del valor de sus acciones, aunque al final de la jornada la pérdida se redujo a un 8,95% al llegar a 3,43 euros la acción.

Sin embargo, la caída bursátil de ayer de la empresa no era una sorpresa ya que el mercado de valores español ha seguido muy de cerca los problemas de Sacyr en Panamá. A pedido de un requerimiento de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) de España, sobre sus cuentas hecho el pasado 23 de diciembre, Sacyr se apuntó los sobrecostos de la ampliación como ingresos contables y dio una imagen de aparente normalidad, sin señales de que abandonaría la obra a medio hacer. No obstante, lo que la CNMV no sabía era que la ACP no estaba dispuesto a pagar el alto sobrecosto que exige Sacyr, situación que ha estallado tras la publicación de la nota.

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