Se efectúa la Marcha por el Orgullo Gay México 2013
Como cada año desde 1978, se realizó el último sábado de junio en la ciudad de México la marcha por los derechos de la comunidad lésbico, gay, bisexual, transexual, transgénero, travesti e intersexual (LGBTTTI), la cual tiene su origen en la llamada Rebelión de Stonewall en Nueva York a finales de los sesenta, en donde un grupo de personas homosexuales hizo frente a la represión policíaca y del Gobierno durante varios días, dando paso a la constitución de las identidades gay, por lo que en varios países del mundo junio es el mes del llamado orgullo gay y los hechos de Stonewall se conmemoran con una marcha en la que la comunidad reivindica sus derechos y demandas.
3 de julio de 2013
Sin embargo, a lo largo de 35 años, la también llamada Marcha del Orgullo Gay ha ido transformándose hasta convertirse en el botín político o económico de algunos grupos de empresarios o políticos quienes ven en la comunidad LGBTTTI una oportunidad de obtener diversos beneficios, lo que a juicio de muchas personas le ha quitado su carácter reivindicativo y de protesta al evento, ocasionando que el mismo sea visto como un acto carnavalesco, lleno de vulgaridad, exhibicionismo y alcohol.
Por primera vez en muchos años, “la marcha” no contó con la presencia y patrocinio de antros, bares y negocios, los cuales retiraron su apoyo ante la advertencia del gobierno capitalino de que prohibiría la venta de bebidas alcohólicas y el exceso de ruido en los carros alegóricos, además de desplegar un fuerte operativo de seguridad para evitar lo que se ha visto en años anteriores: convertir el Paseo de la Reforma en un bar gigante.
Aún así y frente a la amenaza de lluvia y los rumores días antes de que “la marcha” sería cancelada, decenas de miles de personas abarrotaron el camino entre Reforma y el Zócalo del DF ya fuera para protestar, lucir algún vistoso atuendo, ligar, convivir con sus amigos o simplemente como espectador y para tomar algunas fotografías.
Quienes protestaban demandaban igualdad de derechos, aludían a los crímenes en contra de la comunidad, recordando casos de personas asesinadas y la impunidad con que muchos de estos casos se revisten; denunciaban la falta de políticas públicas para el sector LGBTTTI; se pronunciaban contra el sistema capitalista y la cultura excluyente y de discriminación existente en nuestro país, entre otras varias demandas sociales; sin embargo, también es cierto que durante cientos de metros de recorrido no se observaba ninguna pancarta con leyendas combativas; también que en algunos tramos de la marcha había gente estacionada con hieleras, vasos, refrescos y botellas de bebidas alcohólicas como si se tratara de un día de campo; había además gente que vendía cervezas, micheladas, botellas y un sinnúmero de artículos con los colores del arcoíris que tradicionalmente representan a la comunidad LGBTTTI, desde pulseras y banderas, hasta maquillaje, pelucas, gorras, playeras, etc.
Sin duda fue una marcha muy diferente en la que se encontraron diversas ideologías y maneras de vivir la diversidad y la disidencia sexual, en donde no faltó el carácter festivo y colorido que supuestamente caracteriza a la comunidad LGBTTTI, pero en la que también fue visible que años de pugna entre grupos “representativos” han finalmente dañado a “la marcha”, relegando su carácter combativo, minimizándolo y desdibujando su legitimidad.
Llegando al zócalo hubo diversos grupos musicales para animar el evento; la gente permaneció en la plaza hasta casi las 5:00 p. m. cuando la lluvia también se hizo presente.
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