Si Escocia se independiza "no habrá vuelta atrás", asegura Cameron

Si Escocia se independiza "no habrá vuelta atrás", aseguró este lunes el primer ministro británico, David Cameron, en su último viaje al país antes del referéndum secesionista del jueves. Asimismo, pidió a los escoceses no dejarse llevar por el descontento de su gobierno a Londres y una vez más rogó que voten no a la independencia. Afirmó que la independencia, además de ser una decisión irreversible, sería "un divorcio muy doloroso" que conllevaría "el final de Reino Unido tal y como lo conocemos y no tendría vuelta atrás”.

15 de septiembre de 2014

En Aberdeen, la capital petrolera escocesa, realizó estas declaraciones a sólo tres días del momento decisivo. Al mismo tiempo que ambos bandos, separatistas y unionistas, intensifican su campaña, mientras los sondeos siguen sin poder señalar un claro ganador. La Nación señala que alrededor de 500 000 personas aún se muestran indecisas.

De ganar la independencia, Cameron señaló que: "significaría que dejamos de compartir la misma moneda", "se rompen las fuerzas armadas que tantos siglos compartimos" y "no se podrán cruzar tan fácilmente las fronteras". Además de que finalizaría "el apoyo que tienen ahora de las embajadas británicas cuando viajan" y que "si los bancos escoceses atravesasen problemas, serían los contribuyentes los que cargarían con los costos". Prometió un "programa de descentralización sin precedentes" si pierde la independencia.

“	Esta es una decisión que puede romper nuestra familia de naciones y desgarrar Escocia para siempre del resto de Reino Unido. Y tenemos que dejar muy claro que no hay vuelta atrás, no hay repetición. Esta es una decisión para siempre. Si Escocia vota sí, el Reino Unido se dividirá y marcharemos por caminos separados para siempre.	”
— Cameron

Por su parte, Alex Salmond, ministro principal de Escocia y líder independentista, acusó al gobierno de estar detrás de los comunicados de bancos y distribuidoras comerciales que aseguran abandonarán Escocia de ganar el sí, y acusó también a la BBC de dar información sesgada. De acuerdo a The Guardian, fuentes de la BBC han revelado que sus reporteros han sido amenazados verbalmente y vía Internet, y que incluso uno de ellos tuvo que borrar más de 400 tuits de su cuenta oficial de Twitter.