PRÁCTICAS DE DOCUMENTACIÓN. UNIVERSIDAD DE MURCIA

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  • Crianza y maternidad

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Qué...bonito… es ser mamá.

Estoy segura de que a la mayoría de las personas nos causa una enorme ternura ver la imagen de una madre con su bebé recién nacido en brazos. Indudablemente es algo bonito, pero… ¿Lo es tanto como parece?. El tema de la maternidad es comentado en muchos programas televisivos, periódicos, revistas, libros enteros hablando sobre ello… e incluso en torno a una mesa familiar en el momento de la cena. En el título del artículo ‘La maternidad, esa gran desconocida de la que todo el mundo habla’, se refleja muy bien justo lo que estoy intentando decir. Todo el mundo es un experto en el tema: ‘’Suegras, cuñadas, amigas, expertos, empresas… todos opinan con una alegría y una contundencia que dan miedo’’ (Catherine L’Ecuyer, 2017). Además, no lo hacen de una forma objetiva. Como bien apunta Isabel Arrebola, ‘’cuando oímos hablar de ella, no se incluye la otra parte. La dura, la complicada’’. Tener un hijo no es fácil. No lo es ni el embarazo, ni el parto, ni la crianza.

Empecemos por el principio: el embarazo. Es cierto que es una etapa muy bonita e importante en la vida de una mujer, y más aún si se lleva deseando mucho tiempo, pero como ya he dicho, no todo es color de rosa. Por lo general, se tiene un conocimiento bastante equivocado de esta etapa. Culpa de esto la Quiles al postureo social: “tenemos un parásito que nos chupa la energía, unas hormonas que nos anulan la cordura, síntomas que bien servirían como método de tortura, y unas redes sociales que nos dicen que a las demás no les pasa’’. Y es cierto. Lo raro es no tener naúseas, dolores, o mal humor durante el embarazo. Muchas mamás, ya no tan primerizas, recomiendan leer el libro ‘Qué se puede hacer cuando se está esperando’, que ha vendido millones de ejemplares con el fin de ayudar a madres y padres que se encuentran un poco perdidos. Pero el embarazo es solo el principio, un hijo es para toda la vida y nueve meses es muy poco tiempo: ‘’con suerte, el embarazo es la parte dulce. Luego hay que parirlos, criarlos, y para eso no hay manual que te prepare’’ (Quiles, 2016).

Después, llega el parto. Informarte sobre este es esencial para calmar tu preocupación por este día y para tomar decisiones conscientes sobre tu cuerpo y el momento de dar a luz. También hay muchos libros que pueden ayudar a una mujer a hacerlo, y también es necesario saber que es un momento duro. El parto, y el posparto. “Suele ocurrir que, pasadas un par de semanas tras el parto, la madre se mire al espejo y piense… “pero, si yo ya he dado a luz, ¿dónde están mis abdominales?, ¿sigue habiendo alguien ahí dentro que aún no ha salido?”(Flor María Trujillo, 2017).

Y cuando ya tienes a tu hijo, o hija, contigo… va creciendo. Va teniendo determinados comportamientos que nos hacen gracia, nos asustan, nos hacen llorar… Porque ellos mismos hacen todo eso. “¿Por qué nos sorprende en los niños la misma conducta que veríamos como normal en un adulto?” (Carlos González, 2003). A veces las madres tienen miedo de no saber cómo reaccionar ante determinados comportamientos de su hijo, y, aunque yo soy partidaria de pensar que cada madre actúa en ese sentido por inercia, María José Roldán, psicopedagoga, piensa que la ‘crianza positiva’ es el método por el cual todos los niños deberían ser educados: “se basa en el respeto a los hijos, en criar con amor y, sobre todo, en hacerlo a través de una conducta no violenta”.Puede que los primeros años de crianza sean los más duros para las mamás. Según un estudio publicado en la revista ‘The Journal of Reproductive Medicine’ durante los primeros meses de la maternidad, las mujeres tienen comportamientos obsesivos compulsivos. Se preocupan si creen que su hijo ha comido poco. Lo mismo pasa si piensas que por el contrario, su hijo ha comido más de lo que suele comer. Igual pasa con el sueño, etc.

Para concluir, y dejar plasmado que tener el primer hijo tiene cosas muy positivas, pero también cosas muy negativas, os dejo dos frases tan diferentes que en un mismo artículo publica un padre de familia: en primer lugar, apunta que “el primer hijo es como una bomba atómica que destruye por completo la vida que habías construido hasta ese momento”, y unos párrafos más tarde: “es imposible explicar lo bueno que puede llegar a ser tener un hijo. Es una experiencia que puede resultar tan profundamente satisfactoria que cualquier edjetivo es poco para explicarlo”(Alfredo Rodríguez, 2016)

Bibliografía editar

  • Murkoff, H. (2002). Que se puede esperar cuando se esta esperando. Workman Pub.
  • González, C. (n.d.). Bésame mucho.


Fuentes originales de la noticia editar

https://www.guiainfantil.com/articulos/educacion/conducta/la-crianza-positiva-de-los-hijos/

http://www.eldefinido.cl/actualidad/plazapublica/342/Tener_hijos_Infierno_o_Paraiso/

https://elpais.com/elpais/2017/03/15/mamas_papas/1489590314_769373.html

http://www.elmundo.es/elmundosalud/2013/03/27/mujer/1364404332.html

https://lamusicadelagua.wordpress.com/2016/09/14/la-maternidad-esa-gran-desconocida-de-la-que-todo-el-mundo-habla/

http://www.elmundo.es/vida-sana/bienestar/2016/11/22/5832cabb268e3e821e8b45e7.html

http://www.elmundo.es/vida-sana/familia-y-co/2016/01/30/56ab650722601d7b7b8b464a.html

https://elpais.com/elpais/2017/06/23/mamas_papas/1498219689_153259.html